El 19 de noviembre se conmemoró el Día Internacional de la Mujer Emprendedora, una jornada para honrar el talento, la valentía y el esfuerzo de las mujeres que transforman el mundo con sus ideas y acciones.
En Paraguay, la Fundación Paraguaya lidera este cambio, apoyando a más de 80.000 microempresarias con inclusión financiera, capacitación y educación, consolidando el papel de la mujer paraguaya, la más gloriosa de América, como motor de desarrollo social y económico.
El Día Internacional de la Mujer Emprendedora, establecido por el Consejo de las Naciones Unidas, es una oportunidad para reflexionar sobre los desafíos que enfrentan las mujeres en el ámbito empresarial y resaltar su papel crucial como agentes de cambio. En esta fecha, se celebró el ingenio, la pasión y la resiliencia de las mujeres que no solo emprenden negocios, sino que también generan impacto positivo en sus familias y comunidades.
En Paraguay, donde la mujer es reconocida como «la más gloriosa de América», el emprendimiento femenino es símbolo de progreso y esperanza. La Fundación Paraguaya, una institución comprometida con el empoderamiento de la mujer, trabaja con más de 80.000 microempresarias que forman parte de los Comités de Mujeres en todo el país.
Estos comités son mucho más que un espacio de encuentro: son redes de apoyo donde las mujeres reciben créditos accesibles, capacitaciones prácticas y educación financiera que las empoderan para manejar sus negocios con éxito. Además, se promueven incentivos que fortalecen su autoestima y su capacidad de liderazgo, contribuyendo así a reducir la brecha de género en el ámbito económico.
El impacto de este trabajo no solo se mide en números, sino en historias de vida. Rosa, una emprendedora de Itapúa, logró transformar su puesto de venta de alimentos en un negocio próspero que hoy genera empleo para otras mujeres de su comunidad. Como ella, miles de paraguayas están demostrando que con acceso a recursos y conocimientos, pueden superar barreras y convertirse en protagonistas de su propio destino.
Esta jornada también invitó a visibilizar los desafíos que persisten. La desigualdad de género, el acceso limitado a financiamiento y los prejuicios culturales siguen siendo obstáculos que muchas mujeres enfrentan al emprender. Es por eso que iniciativas como las de la Fundación Paraguaya son esenciales para construir un futuro donde todas las mujeres tengan las mismas oportunidades de crecer y triunfar.
En el Día Internacional de la Mujer Emprendedora, se celebró el esfuerzo colectivo por empoderar a las mujeres, reconocer su talento y abrir puertas para su desarrollo integral. Porque cuando una mujer emprende, el impacto positivo se multiplica, beneficiando a toda la sociedad.