En la ocasión se realizó un recorrido por la nueva instalación que cuenta con una capacidad productiva de 3.000 kilos de queso por mes, lo que representa el procesamiento de casi 30.000 litros de leche fresca, proveniente del tambo de leche de la escuela y de la compra de tamberos regionales locales, generando no solo un espacio de educación orientada al emprendedurismo sino también un incentivo para el comercio local.
La Fundación Paraguaya inauguró su nueva Fábrica de Quesos en la Escuela Agrícola Autosostenible de Cerrito con presencia Marc Ostfield, embajador de Estados Unidos en Paraguay; Mark Kerr, director de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID); James Robert Krueger, director y profesor del Institute of Science and Technology for Development de Worcester Polytechnic Institute (WPI); Giancarlo Aubry y Lizzie Kennedy, presidente de Nestlé Argentina, Uruguay y Paraguay, y gerente general de Nestlé Paraguay, respectivamente; y de Martín Burt y Luis Fernando Sanabria, director ejecutivo y gerente general de Fundación Paraguaya, respectivamente.
Martín Burt, director ejecutivo de Fundación Paraguaya, destacó que la nueva fábrica tiene una inversión aproximada de 700 mil dólares y es posible gracias al aporte de importantes cooperantes como USAID, WPI, Nestlé Paraguay, Kiva, Skoll, doTERRA y Peery Foundation. “La educación de calidad es vital, motivo por el cual tenemos nuestras escuelas agrícolas que generan productos agropecuarios de calidad que se comercializan en nuestro país y muy pronto serán objeto de exportación, lo que nos permite ser totalmente autosostenibles. Nosotros enseñamos a los jóvenes no solamente a plantar tomates sino a ganar plata con lo que producen, por ello nuestro lema es ‘Aprender haciendo, vendiendo y ganando dinero’, un modelo educativo paraguayo que ya se exporta e implementa en varios países. Queremos que todos los jóvenes sean libres e independientes basados en el talento humano”, dijo.
Lizzie Kennedy, gerente general de Nestlé Paraguay, celebró esta nueva alianza con la Fundación Paraguaya, que proyecta un círculo virtuoso de progreso para el país. “Esta Fábrica de Quesos es uno de los sueños que compartimos en conjunto con Fundación Paraguaya y lo que podemos decir es que aquí realmente empezamos a incidir en la transformación de los jóvenes y de sus familias, empezamos a enseñarles cómo ser competitivos tanto a nivel nacional como internacional. Como Nestlé Paraguay estamos listos para formar parte de la transformación de nuestros jóvenes”, indicó.
Por su parte, James Robert Krueger, representante de WPI, resaltó los tres conceptos que embandera la Fundación Paraguaya en pro de una educación de calidad. “Llegamos a la Fundación Paraguaya hace 10 años atraídos por tres conceptos que los representa: determinación, autosuficiencia y sostenibilidad. Así, desde hace 10 años venimos a enseñar emprendedurismo social con espíritu empresarial; desde hace 5 años enviamos a nuestros estudiantes universitarios; y también aumentamos nuestro apoyo a las escuelas agrícolas de la Fundación incluyendo educación en ciencias, tecnología y matemáticas, con nuestros profesores. Estamos muy felices de formar parte de este gran proyecto educativo al que incluiremos enseñanza de robótica para la resolución de problemas y para fomentar el pensamiento crítico de los jóvenes paraguayos”, apunto.
La Escuela Agrícola de Cerrito también cuenta con una planta láctea que tiene una capacidad de producción de 500 kilos de queso por mes, procesando unos 5.000 litros de leche fresca. Con la nueva Fábrica de Quesos la cifra mencionada se sextuplicará, al igual que el número de estudiantes que participarán en la producción como monitores, que actualmente es de 16 alumnos por año, a lo que se sumarán 30 por año, a través de un sistema de rotación de 2 y 6 por vez, respectivamente, que les permitirá aprender el proceso de fabricación de quesos.
La instalación cuenta con 730 metros cuadrados y un equipamiento moderno que incluye dos tanques de refrigeración de 1.000 litros cada uno; una planta de pasteurización que puede procesar hasta 2.000 litros por hora; una cuba de cuajo de 1.500 litros de capacidad; una prensa horizontal neumática de seis canales; una envasadora al vacío y cinco cámaras frigoríficas para la premaduración, maduración y conservación de los quesos.
Además de seguir con la línea de producción anterior, que incluye los quesos de estilo ibérico, dulce de leche y yogur, se incorporará la producción de queso azul, intentando llegar a nuevos y más sofisticados mercados.
La nueva Fábrica de Quesos forma parte del proyecto ASHA (American Schools and Hospitals Abroad) del gobierno de Estados Unidos, que cuenta con una inversión total de 1.900.000 dólares, para mejorar la experiencia académica de los jóvenes rurales de zonas vulnerables del Paraguay.
La Escuela Agrícola Autosostenible de Cerrito. La fábrica marcará la última innovación en el modelo de escuela secundaria autosostenible de la Fundación Paraguaya, que enseña a través de su metodología de “Aprender haciendo, vendiendo y ganando dinero”, dirigida a estudiantes de áreas vulnerables del país.
Fundada en 2003 y ubicada en Benjamín Aceval sobre la Ruta Transchaco km 46,5, la escuela ha capacitado a miles de jóvenes, quienes combinan sus estudios entre clases convencionales y prácticas en las unidades didáctico productivas, como el hotel, la planta láctea, panadería y granja, donde los estudiantes elaboran una variedad de productos que posteriormente son comercializados por los estudiantes, y con cuyos ingresos se cubren todos los costos de la escuela agrícola.
La Fundación Paraguaya es una organización sin fines de lucro con sede en Asunción, Paraguay. Desde 1985, trabaja para “desarrollar e implementar soluciones prácticas, innovadoras y sostenibles, que permitan activar el potencial emprendedor de las familias, para eliminar su pobreza multidimensional y vivir con dignidad”, a través de un amplio alcance comunitario con sus cuatro programas principales: Microfinanzas, Educación Emprendedora, Escuelas Agrícolas Autosostenibles y el Semáforo de Eliminación de Pobreza. El motor hace más de 35 años es poder cambiarle la vida a la gente y devolverle a las familias paraguayas la dignidad que les pertenece.