El presidente de la Asociación Paraguaya de Criadores de Brafort, Oliver Ferreiro, indicó que la cadena de la carne no está siguiendo su buen camino debido a que considera que se encuentra cortada por los bajos precios que se paga por el producto, además de la inminente necesidad de abrir nuevos mercados. Asimismo, indicó que la ganadería paraguaya se enfrenta al gran desafío que supone el factor climático.
El esfuerzo sigue siendo bastante grande para el sector productivo en cuanto a la ganadería nacional, ante la necesidad de ir mejorando la calidad de la carne paraguaya. Sin embargo, las quejas siguen siendo en torno al precio que los mismos perciben por los ganados, debido a que consideran que sigue siendo el más bajo.
En ese sentido, Ferreiro sostuvo que a pesar de los esfuerzos que se realiza en la producción primaria, no se está viendo avances debido a que los precios del mercado siguen siendo bajos y no permiten una buena planificación para invertir a futuro. Señaló que se está trabajando entre varios sectores con mucho esfuerzo pero, no visualizan cambios significativos, por lo que se encuentran bastante preocupados.
“Los productores somos tomadores de precios, y estamos haciendo las tareas lo mejor posible con inversiones en genética, infraestructura, tajamares, recuperación de pasturas y más, pero no vemos un esfuerzo por avanzar en los mercados”, dijo.
Aseguró que no puede ser que sigamos dependiendo de Chile, Rusia y dos o tres países más, debido a que considera que debemos cambiar la mentalidad, tener apertura y apostar por nuevos mercados. Añadió que no busca culpables, pero apuntó a la necesidad de que todos los implicados puedan formar una mesa a fin de determinar la problemática real.
Aclaró que la situación climática, tres años de falta de lluvia en el Chaco paraguayo, es bastante preocupante para todo el sector ganadero en cuanto a la alimentación de los animales, debido a que ya no cuentan con la misma cosecha de pasto. Alegó que de pasar a tener 15 a 18 fardos por hectárea quedaron a cinco, mientras que sigue la faltante de agua.
Fuente: La Nación.
