La Tecnología EM•1 estuvo presente en el 18° Día de Campo de la Cooperativa Sommerfeld, donde sus representantes destacaron sus beneficios, como la mejora de la salud del suelo, el control ecológico de plagas y su aporte a una agricultura más sostenible. Además, se compartieron casos de éxito y se brindó asesoramiento personalizado a los asistentes.
El Ing. Jorge Martínez, director de Tecnoempar S.A., enfatizó en la importancia de trabajar de la mano con los productores locales, quienes son los principales maestros en el proceso de una agricultura regenerativa y sostenible, una práctica que como empresa lideran en el país desde hace más de una década.
Martínez destacó el uso de la Tecnología EM•1 una innovación basada en microorganismos, con sede en Japón – Okinawa y presencia en más de 120 países. Según el ingeniero, esta ha sido fundamental para impulsar la producción agrícola sostenible y la restauración del medioambiente a nivel mundial.
«Estamos muy orgullosos de ser los representantes de esta tecnología en Paraguay. A través de EM•1, buscamos no solo mejorar los rendimientos agrícolas, sino también restaurar los suelos y preservar el medioambiente. Nuestros productores son aliados esenciales en este proceso, y es un honor estar presentes en este día de campo, donde podemos reforzar lazos», señaló Martínez.
El director de Tecnoempar también abordó el desafío de combinar la sostenibilidad con rentabilidad. «Es fundamental que la agricultura regenerativa no solo beneficie al medioambiente, sino que también sea rentable para los productores. No debemos olvidar que el éxito de cualquier innovación depende de su viabilidad económica», agregó.
Martínez concluyó su intervención animando a los productores que aún no se han sumado a esta revolución agrícola a unirse a la agricultura regenerativa. «Este es el momento. Estamos en 2025, y no hay mejor oportunidad para sumarse a esta tecnología que está transformando la agricultura a nivel mundial», afirmó.
Por su parte, el Ing. Jorge Guerrero, técnico de Tecnoempar, comentó que la Tecnología EM•1 es una solución innovadora que está transformando la agricultura.
«Estamos trabajando estrechamente con empresas como Bio Roga y Bio-Raíz para ofrecer un paquete tecnológico que permite inocular las semillas con productos naturales. Este año, especialmente para la zafra de maíz, combinamos EM•1 más la bacteria Azospirillum, Trichoderma y Arthrobacter, que fortalecen el sistema radicular, mejorando su anclaje y profundidad. Esto es crucial para obtener cultivos más resistentes y capaces de soportar las condiciones adversas, como la sequía, y garantizar una mayor producción», comentó Guerrero.
EM•1 no solo potencia el desarrollo de los cultivos, sino que también es clave para regenerar los suelos. Según Guerrero, este enfoque se alinea con los principios de la agricultura regenerativa, que busca restaurar los suelos mediante el equilibrio de los microorganismos benéficos. “Los suelos tienen microorganismos naturalmente, pero el desequilibrio, muchas veces causado por el uso excesivo de productos químicos, afecta su salud. Con este producto podemos enriquecer el suelo con microorganismos positivos, reduciendo la presencia de patógenos que afectan la absorción de nutrientes y, por ende, el rendimiento de los cultivos», afirmó.
El uso de estos productos naturales también permite reducir la dependencia de agroquímicos, lo que se traduce en menores costos y un menor impacto ambiental. «Nuestro objetivo es acompañar a los productores en todo el proceso, desde la desecación hasta la cosecha. Incluso en las primeras etapas, como la desecación del cultivo, EM•1 actúa como un coadyuvante de herbicidas, potenciando su efectividad y protegiendo el suelo de la oxidación y la pérdida de nutrientes», agregó Guerrero.
La agricultura regenerativa está ganando terreno entre los productores que buscan una solución más sostenible y eficiente. Esta filosofía, que promueve la regeneración del suelo a través de prácticas biológicas y el uso de microorganismos benéficos, está alineada con la visión de Tecnoempar y sus aliados estratégicos. Guerrero resaltó que la receptividad de los productores a esta tecnología ha sido positiva: «Cada vez más, los agricultores están interesados en opciones que les permitan mejorar la salud del suelo y reducir sus costos».
Finalmente, el Ing. Jorge Guerrero dijo que: «Estamos para apoyarles. La tecnología EM•1 y las prácticas de agricultura regenerativa están abiertas para todos aquellos que deseen mejorar la salud de su suelo, reducir el uso de químicos y, lo más importante, obtener mejores cosechas. Nuestra meta es acompañarlos y obtener los resultados que todos deseamos: cultivos más saludables y una mayor productividad».
Samuel López, gerente Comercial de Tecnoempar, destacó la relevancia de compartir los resultados alcanzados en diversas zonas del país como San Pedro, Concepción, Amambay, Chaco e Itapúa, donde la tecnología EM•1 ya está siendo aplicada con éxito.
«Estamos trayendo la experiencia y los resultados que hemos logrado en diferentes regiones. Hoy estamos aquí para compartir esta experiencia con los productores de la zona, que ya están viendo los beneficios en sus fincas, en sus actividades pecuaria», expresó López.
El ingeniero invitó a los productores de la zona a acercarse a los distribuidores locales, quienes están disponibles para ofrecer más información y asesoramiento sobre cómo incorporar esta tecnología en sus actividades.
Cledison Conte, representante de Bio-Raíz, compartió también su visión de una agricultura más sostenible y rentable. Dijo que son una empresa dedicada a la producción y distribución de inoculantes biológicos, con el fin de restaurar y equilibrar los suelos agrícolas, ofreciendo alternativas que permitan combatir enfermedades del suelo y otros patógenos comunes en cultivos de soja y maíz.
«Durante muchos años, hemos sufrido con enfermedades del suelo, lo que afectaba gravemente la salud de nuestras plantas. En este sentido, tuvimos que buscar estrategias para minimizar el daño causado por los hongos patógenos y restaurar el equilibrio del suelo», comentó Conte.
Y agregó: «Nuestro objetivo es transformar la agricultura en Paraguay, haciendo más sustentable y regenerativa la producción, con menos riesgos y más rentabilidad».
Bio-Raíz propone una alternativa más natural y efectiva, basada en el uso de microorganismos y prácticas agrícolas como el cambio a cultivos con cobertura y la diversificación de especies. Según Conte, estos métodos mejoran la salud del suelo y también contribuyen a una mayor productividad en los cultivos, reduciendo los costos y aumentando la rentabilidad, especialmente para la soja. «La agricultura regenerativa no es una tarea sencilla. Requiere de tiempo y un cambio en las prácticas tradicionales. Sin embargo, es posible y se traduce en un futuro más sostenible para la agricultura del país», afirmó Conte.
El Dr. Rudy Gaona, ceo de Bio Roga, dijo que como lema tienen «Suelos Sanos, Animales Felices». La firma se dedica a ofrecer tecnologías innovadoras para mejorar la salud de los suelos y el bienestar de los animales, contribuyendo a un ambiente más saludable y equilibrado, explicó.
A través de su representación de la biotecnología EM•1, Bio Roga está implementando soluciones avanzadas en el manejo adecuado de los suelos. La inoculación de semillas durante el ciclo vegetativo y el uso de esta tecnología en máquinas de corte y pique para silaje son algunos de los métodos clave que están transformando la producción agrícola y ganadera. Estas soluciones mejoran el rendimiento de los cultivos y optimizan la nutrición animal, estabilizando los alimentos para prevenir pérdidas de nutrientes.
«Un aspecto destacado de esta tecnología es su capacidad para promover una fermentación natural de la materia orgánica, eliminando los malos olores, reduciendo patógenos e insectos. Es decir, tiene un impacto directo en la salud digestiva de los animales, garantizando la efectividad probiótica y antioxidante en todo el proceso digestivo», indicó Gaona.
Bio Roga, en colaboración con la empresa Bio-Raíz, también está implementando el uso de microorganismos aislados que, al coexistir y cooperar con la biotecnología EM•1, contribuyen a la salud tanto de los cultivos como del suelo y del ambiente en general. Este enfoque integral fomenta prácticas agrícolas regenerativas y también promueve la sostenibilidad y el respeto por el medioambiente.
El Dr. Gaona destacó la importancia de un enfoque holístico para la salud del suelo, el ambiente, los animales y, por ende, de los seres humanos, alineándose con el concepto de One Health. Este enfoque interconectado reconoce que la salud del suelo, de los animales y del ser humano están íntimamente relacionadas y, por lo tanto, deben ser tratadas de manera conjunta y equilibrada.
Tecnoempar, en colaboración con distribuidores locales como Bio Roga y Bio-Raíz, sigue expandiendo su red de aliados comerciales en todo el país para llevar la tecnología a más productores y fortalecer el impacto positivo en la agricultura nacional.