La reunión entre las autoridades nacionales y el embajador de Estados Unidos, Marc Ostfield, fue decisiva para impulsar la exportación de carne paraguaya al país norteamericano. Esta iniciativa sin duda contribuirá al crecimiento y desarrollo económico del país, brindando una plataforma para que sus productos lleguen a un mercado de gran valor.
En la reunión, que se realizó ayer martes, estuvieron presentes el presidente de la República, Mario Abdo Benítez; el jefe de Gabinete, Hernán Huttemann; el canciller nacional, Julio Arriola; el ministro de Hacienda, Óscar Llamosas, y el titular del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), José Carlos Martin Camperchioli.
“Paraguay en este momento está en condiciones de decir que ya cumplió con todos los requerimientos que tienen que ver con lo documental, las auditorías presenciales y con todas las acciones correctivas que nos habían señalado”, expresó el jefe de Gabinete, Hernán Huttemann.
Por su parte, Julio Arriola, ministro de Relaciones Exteriores, declaró que el objetivo principal de la reunión fue discutir el proceso para lograr el ingreso de la carne paraguaya al mercado estadounidense. En este sentido, destacó la importancia de este paso para fortalecer las relaciones entre ambos países.
Paraguay culminó el proceso de auditoría en diciembre, cumpliendo con todos los requerimientos documentales y realizando las acciones correctivas pertinentes, destacó.
A partir de ahora, como parte del proceso, se tiene que llevar a cabo una publicación, por 60 días, para que cualquier interesado pueda opinar sobre el tema, explicó Arriola.
Se estima que la apertura de este mercado de productos cárnicos generaría ingresos de hasta USD 100 millones, con la exportación de al menos 20.000 a 25.000 toneladas.
Esta nueva fuente de ingresos traería con ella una gran oportunidad para la industria cárnica, permitiendo a los exportadores maximizar sus ganancias y ofrecer a los compradores productos de mayor calidad.