En la ciudad de Juan Manuel Frutos, departamento de Caaguazú, la firma Villa Franca S.A., está llevando a cabo una importante inversión que consiste en una «Planta Procesadora de Maní», la cual nace como una alternativa para la rotación de cultivo y está pensada principalmente para exportación, aunque también abastecerá al mercado local.
La apuesta marca el inicio de un nuevo rubro en el quinto departamento del país, que también se traduce en más oportunidades para los productores, ya que podrán diversificar su producción con la explotación de este alimento.
De acuerdo con Johan Heinrichs Bergen, directivo de la firma, la planta de maní ayudará a agregar un producto más en el campo, «creemos que es muy importante porque el tipo de tierra admite la rotación de cultivo con el maní en la zona», aseveró.
En los cañaverales de la zona generalmente se realizan rotación pasando 5 a 6 años, «después de este tiempo hay que renovar y es necesario que se haga otro tipo de cultivo, por 1 o 2 años», explicó.
Las Rotaciones del cultivo de caña dulce con el maní demuestra claramente en los países vecinos muy buenos resultados, «se probó acá y es un buen rubro para hacer rotación en caña dulce», manifestó Heinrichs.
La construcción de la planta inició en mayo de 2021. Actualmente está casi terminada y la recepción ya está funcionando, pues la cosecha está, y se ha acopiado un gran volumen de maní. «Faltan las máquinas procesadoras que son de última generación, de procedencia estadounidense que llegaron en puerto para ser despachado y montado para su funcionamiento», informó el directivo.
En cuanto a la materia prima, gran parte del cultivo es propio y el resto acopian de productores de la zona. La producción es posible mediante la implementación de maquinarias especiales y el asesoramiento de un técnico especialista en este cultivo.
Para la comercialización del producto el proceso consiste en el descascarado, la selección por tipo de tamaño, color y calidad del maní. La capacidad de almacenaje en cáscara ronda las 13.000 toneladas, dependiendo del rendimiento. La industria contará con certificación e innovaciones exigidas por el mercado internacional.
De forma directa generarán fuentes de trabajo para alrededor de 70 personas e indirectamente beneficiarán a otras más en el campo, pues será un rubro muy rentable.
«Es un desafío muy grande para nosotros y creemos que será un producto de gran valor para el campo. Aunque inicia como un proceso de rotación para la caña dulce, también se hará con otros cultivos y de forma directa», finalizó el directivo de Villa Franca S.A.