Un año más, la Estancia Santa Ana, ubicada en el departamento de Caaguazú, abrió sus puertas para celebrar el Día de Campo Técnico, un evento que reúne los avances más recientes del Grupo GPSA en materia de innovación agrícola.
Expertos y técnicos del sector agrícola tuvieron la oportunidad de conocer de primera mano los resultados de los ensayos y las innovaciones desarrolladas en colaboración con los socios comerciales del grupo.
El Ing. Fabián Pereira, director Comercial de GPSA, hizo hincapié en la adopción nuevas herramientas productivas para maximizar los rendimientos de cultivos clave como la soja y el maíz. “Pudimos mostrar todo lo que el grupo está implementando para potenciar la producción agrícola. Este evento es clave para los técnicos que colaboran en el área comercial y nuestros clientes, quienes han podido ver las tecnologías que estamos utilizando”, dijo Pereira.
La jornada contó con la presencia de importantes empresas multinacionales del sector agrícola, como Syngenta y BASF, las cuales compartieron sus últimas soluciones para mejorar el rendimiento de los cultivos.
«Hemos recorrido diferentes áreas con expertos de Syngenta y BASF, así como con los técnicos de GPSA, y pudimos explorar varias opciones tecnológicas que pueden ser combinadas para optimizar la salud de las plantas y los rendimientos de los cultivos», explicó.
Una de las principales preocupaciones en el sector es el manejo de los nematodos, plagas que afectan gravemente el desarrollo de los cultivos, especialmente la soja y el maíz. En este sentido, se destacó el uso de productos innovadores de Syngenta para el control de estas plagas, que permiten no solo proteger el cultivo, sino también preservar la salud del suelo a largo plazo.
“Sabemos que dependemos en gran medida del clima, y aunque no podemos controlarlo, sí podemos adoptar tecnologías que nos ayuden a minimizar los efectos del estrés hídrico, las plagas y las enfermedades que pueden afectar a las plantas. Esto es lo que estamos compartiendo con los productores”, agregó Pereira.
La jornada también abordó los desafíos climáticos que enfrenta el país, como la sequía prolongada que afecta a la región norte, mientras que algunas áreas del sur experimentan lluvias. En particular, en la zona de Misiones y Caazapá, se ha registrado una sequía de más de un mes, lo que podría impactar negativamente en los próximos cultivos.
Pereira señaló la importancia de la protección de las plantas, especialmente durante situaciones de estrés hídrico. “La planta tiene mecanismos de defensa ante la falta de agua, como la expulsión de hojas y flores. Sin embargo, cuando estas hojas caen, la planta pierde su capacidad de nutrición, que afecta negativamente el desarrollo del grano. Por eso, las tecnologías que estamos presentando son fundamentales para mantener la salud de la planta y garantizar un cultivo productivo”, agregó el director comercial.
El día de campo resultó en una valiosa oportunidad para los productores de acceder a herramientas productivas y opciones tecnológicas para mejorar sus rendimientos.
Por su parte, el Ing. Martín Pereira, director de Producción Agrícola de GPSA, explicó que en la Estancia Santa Ana realizan ensayos junto a sus partners comerciales con fertilizantes, semillas, herbicidas, insecticidas y fungicidas. “Es una rica experiencia técnica que nos permite seguir aprendiendo de las pruebas realizadas, con testigos y competencias que son fundamentales para mejorar nuestras recomendaciones al productor”, añadió.
El encuentro de este año también tuvo un enfoque especial en la gestión de la producción frente a los desafíos climáticos y económicos actuales.
“Sabemos que estamos atravesando momentos de gran estrés, especialmente en términos climáticos y en el proceso de negociación de la producción. Las condiciones no siempre son las más favorables, por lo que la eficiencia debe ser nuestra prioridad para lograr altos rendimientos a bajos costos, siempre cuidando la salud del suelo, lo cual es esencial para asegurar la rentabilidad a largo plazo de nuestros negocios”, explicó el director.
También se pudo visualizar los avances tecnológicos que están marcando el futuro de la producción agrícola. “Estamos viendo un gran potencial de mejora en todos los aspectos de la producción. Con estos avances, no solo estamos optimizando los rendimientos, sino también asegurando que nuestros métodos sean más sostenibles”, remarcó Pereira.
Fabrizio Pereira, joven miembro del Grupo GPSA, compartió su visión sobre el futuro de la agricultura familiar y la importancia de la innovación tecnológica en el sector. «Hoy recorrimos el campo y vimos mucha tecnología. Estamos aprendiendo, viendo lo que mi abuelo consiguió con mucho trabajo, y cómo lo continuaron mis tíos y mi papá. El objetivo es seguir aprovechando todo esto y aprender para continuar creciendo», afirmó con entusiasmo.
El Grupo GPSA, una empresa familiar que ha logrado adaptarse y crecer con el tiempo, se ha distinguido por su capacidad de incorporar nuevas tecnologías en sus procesos.
Fabrizio destacó el aprendizaje de esta jornada, especialmente en relación con los productos y los procesos utilizados en la soja. «No es que la soja se coseche de la noche a la mañana. Es un proceso muy complejo, largo, que requiere mucho esfuerzo y sacrificio. Si no te adentrás en todo eso, no te das cuenta de lo complejo que puede llegar a ser», explicó el joven, quien subrayó la importancia de observar y comprender cada etapa del proceso agrícola.
El joven Pereira, quien ha crecido rodeado del campo, confesó su pasión por esta actividad y la convicción de que el relevo generacional es clave para mantener el crecimiento de la empresa. «Me encanta el campo, y si te gusta, vas a continuar con este relevo generacional. El campo siempre puede crecer. Debemos innovar, incorporar tecnologías y abrir nuevos mercados. Hay que pensar siempre en grande», enfatizó.
De generación, en generación
El presidente de GPSA, Graciano Pereira, reconocido por ser el artífice de muchas de las iniciativas que hoy lideran el sector agrícola en Paraguay, habló sobre el presente y futuro de la producción agropecuaria.
Pereira, quien fundó el Grupo GPSA, destacó la importancia de la continuidad en el trabajo y el esfuerzo realizado durante más de 40 años en la industria agrícola. «Este legado es el resultado de un sacrificio y un trabajo arduo, no solo mío, sino de toda una generación que ha contribuido al desarrollo del sector», expresó.
La visión de Pereira está centrada en el trabajo en equipo. Hoy, él comparte este camino con sus seis hijos, quienes se encuentran involucrados activamente en distintas áreas del grupo familiar, desde la agricultura y la ganadería hasta la industria. «La idea es que las próximas generaciones, incluyendo a mis nietos, continúen con este legado y sigan fortaleciendo el grupo», comentó.
Uno de los pilares fundamentales que ha permitido la continuidad de este legado familiar es el apoyo profesional especializado.
«Nos hemos rodeado de expertos en empresas familiares, que nos asesoran, un proceso que no es sencillo, pero es esencial para el éxito de la empresa», indicó Pereira. Esta estrategia de contar con profesionales del sector ha sido clave para mantener la armonía y el crecimiento dentro del grupo familiar.
El compromiso de Pereira con el desarrollo de la producción nacional es incuestionable. «Estamos apostando a la producción en Paraguay, buscando generar más oportunidades de trabajo. En el Grupo GPSA contamos con cerca de 500 funcionarios, lo que representa un apoyo a 500 familias. Esto nos llena de satisfacción, ya que nuestra misión siempre ha sido ser un soporte para las familias de nuestros empleados», resaltó el presidente de la empresa.
Empresas
Samuel Setrini, desarrollista de Syngenta, dijo que presentaron una parcela de soja donde se puso en evidencia el potencial de la tecnología VICTRATO, un innovador producto diseñado para el tratamiento de semillas.
Su principal beneficio radica en su capacidad para manejar un complejo de nematodos, así como para combatir enfermedades del suelo y ataques tempranos en las plantas de soja, como las manchas.
Setrini resaltó que, gracias al uso de este producto, se observa un control efectivo de las manchas de forma temprana, lo que impacta positivamente en el manejo de enfermedades en el cultivo.
A través de un enfoque integral de manejo de enfermedades, Syngenta está destacando los resultados obtenidos en las parcelas experimentales, donde se observan diferencias significativas en la sanidad de las hojas y una mayor retención foliar en el tercio inferior de las plantas. Estos efectos se traducen en un incremento en el rendimiento durante la cosecha.
Otro aspecto importante que Setrini mencionó fue la mejora en la salud del sistema radicular. Se observó un aumento en el volumen radicular de las plantas tratadas con VICTRATO, lo que contribuye a un mayor desarrollo y resistencia de las raíces, factor clave para el crecimiento saludable de las plantas de soja.
«Estamos convencidos de que VICTRATO es una herramienta extraordinaria que transformará el manejo de enfermedades en soja, comenzando desde la siembra y enfrentando de manera eficaz las amenazas que provienen del suelo, impactando positivamente en los rendimientos finales», concluyó.
El Ing. José Arzamendia, DTM de Syngenta, profundizó sobre el impacto de las plagas y cómo Syngenta está posicionando productos innovadores para mitigar su efecto en el rendimiento y rentabilidad del productor.
Una de las principales amenazas en el cultivo de maíz es la cigarrita, un insecto que transmite un virus que afecta la planta, debilitándola y reduciendo su capacidad de producir espigas de calidad.
Arzamendia explicó que, al controlar esta plaga, se mejora la resistencia de la planta, lo que se traduce en un aumento significativo en el rendimiento del cultivo y una mayor rentabilidad para los productores.
«Estamos viendo resultados muy positivos con el control de cigarrita gracias a nuestra tecnología. Esta plaga ha sido una de las más problemáticas para los productores de maíz en los últimos años, pero con el uso adecuado de nuestros productos, estamos logrando una alta eficiencia en su manejo», comentó.
Además de la cigarrita, los productos de Syngenta también están diseñados para controlar otras plagas como chinches, trips y pulgón, que afectan tanto al maíz como a la soja. El beneficio principal que Syngenta busca ofrecer a los productores es una mayor rentabilidad y reducir las pérdidas causadas por plagas. Al controlar, se previene la debilitación de las plantas, lo que mejora la producción de espigas fuertes y saludables.
El ingeniero Arzamendia señaló que el control de la cigarrita es esencial para garantizar que el maíz no solo sobreviva, sino que logre un crecimiento óptimo y una cosecha de calidad. «Si no controlamos estas plagas, el cultivo se vuelve más susceptible a daños y pierde productividad», añadió.
Con el lanzamiento de la tecnología PLINAZOLIN, Syngenta ha proporcionado una solución avanzada que mejora significativamente la eficiencia en el control de plagas. Esta nueva herramienta representa una inversión para los productores, quienes, como señala Arzamendia, siempre buscan tecnología que les permita mejorar su rendimiento.
«El PLINAZOLIN es una inversión para el futuro. Después de años de investigación, esta nueva herramienta es una de las más efectivas para el control de plagas, y los productores saben que, al invertir en esta tecnología, podrán mejorar su productividad a largo plazo», remarcó el profesional.
Innovación y calidad
El Ing. Fredy Ferreira, DTM de GPSA, comentó que uno de los productos más importantes que ofrecen es la línea Gama, cuya fábrica se encuentra estratégicamente ubicada para brindar un apoyo fundamental en la nutrición y fertilización foliar, dos aspectos cruciales en el ciclo de cultivo.
«La fertilización foliar es un complemento esencial para maximizar los rendimientos de los cultivos. Los agricultores hoy en día enfrentan el desafío de producir más en espacios más reducidos, y Gama está diseñada para acompañar a los cultivos desde el tratamiento de semillas hasta la cosecha de los granos», explicó.
Una de las principales ventajas es que, a diferencia de otras empresas que importan productos terminados, la compañía importa materias primas de la más alta calidad a nivel mundial y las elabora localmente.
Esto garantiza que los productos salgan frescos, recién fabricados y perfectamente adaptados a las necesidades específicas de los cultivos de la región. «Al contar con nuestra propia fábrica, podemos asegurarnos de que nuestros productos sean de calidad excepcional y respondan a las necesidades particulares de los agricultores nacionales», afirmó Ferreira.
GPSA es una empresa 100 % nacional, lo que refuerza su compromiso con el desarrollo del sector agrícola en el país. «Mi mensaje para los agricultores es que se animen a conocer y probar la línea de productos Gama. Nuestra fábrica está especializada en mejorar y proteger los rendimientos de los cultivos, y estamos para brindarles soluciones innovadoras y de calidad», agregó Ferreira.
La jornada también fue un punto de encuentro para compartir conocimientos y experiencias entre los principales actores del sector agropecuario, reafirmando el compromiso de GPSA y sus aliados con el crecimiento y la sostenibilidad de la agricultura paraguaya.