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Fundación Ideagro busca optimizar el desarrollo agropecuario

Se hizo la presentación oficial de la Fundación Ideagro, creada por las cooperativas menonitas del Chaco Central y que tiene como objetivo potencializar el desarrollo agropecuario en el Chaco Central.

El presidente del Consejo Administrativo, Lic. Sebastian Boldt, destacó principalmente la visión, misión y objetivos por los cuales fue creada la fundación.

Expresó que como cooperativas del Chaco Central vieron la importancia de unir  fuerzas en el área de investigación y desarrollo agropecuario, por la cual fue constituida la Fundación IDEAGRO con el respaldo de las Cooperativas Chortitzer, Fernheim y Neuland, para la consolidación del desarrollo agropecuario en todo el territorio chaqueño.

 

 

Durante la conferencia de prensa agregó: “No solo nosotros tenemos este compromiso. Estamos conscientes que primero en este paso de la formalización y luego en el avance de las actividades ustedes son nuestros aliados y nos respaldarán con las coberturas correspondientes para el desarrollo de nuestro Chaco paraguayo, motivo por el cual les hemos convocado hoy a este lanzamiento”.

Luego el Lic. Mba Norbert Dueck, gerente general de la Fundación, comentó sobre los ejes de trabajos y proyectos para los próximos meses destacando tres puntos principales: Investigación /desarrollo, Capacitación y Transferencia de tecnología​ y Servicios.

 

En proyectos de I&D​ la fundación trabajará en:

Agricultura (comparación de variedades, técnicas de producción de los diferentes cultivos de renta y de cobertura)​; ganadería​, sector lácteo​, producción alternativa ​y proyectos de creación de valor en origen.

 

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​Cáñamo industrial: Cosecha mecanizada en los cultivos de San Pedro e Itapúa

Siguen los trabajos de cosecha en los cultivos experimentales de cáñamo industrial no psicoactivo en los departamentos de San Pedro e Itapúa. La recolección de semillas se venía realizando de manera manual, que ocasionaba que muchas semillas se perdieran en el proceso, con la utilización de las maquinarias, se da un mejor aprovechamiento integral de los cultivos y se logra una mejor cosecha.

La cosecha mecanizada de cáñamo para producción de cannabis no psicoactivo con fines industriales en la localidad de Lima, departamento de San Pedro, y Pirapó, en el departamento de Itapúa, está logrando la optimización del tiempo empleado para la labor de cosecha, así como el aprovechamiento de la totalidad de las semillas, mejorando notablemente el volumen cosechado.

 

 

Cabe destacar, que el Ministerio de Agricultura y Ganadería, a través de alianzas público-privadas, inició la cosecha de cáñamo no psicoactivo, de manera experimental en 5 departamentos a nivel país, logrando un poco más de 60 hectáreas de producción dentro de la Agricultura Familiar campesina, para la próxima campaña de cultivo, se estima cubrir unas 700 hectáreas aproximadamente.

Ganadería

El sistema ganadero conservacionista que Uruguay le mostró a la ONU

Aunque la ganadería es señalada, por algunos, como una de las culpables del cambio climático, el productor uruguayo Esteban Carriquiry muestra todo lo contrario.  Él hace ganadería exclusivamente sobre campos naturales, fomenta la recuperación de la biodiversidad y exporta carne de alto valor al mercado europeo.

En síntesis, el esquema de la empresa familiar de Carriquiry es el siguiente: cuentan con dos campos (1.359 hectáreas propias más 470 hectáreas alquiladas), en uno hacen la cría y en el otro hacen la recría y la invernada de las hembras. En total tienen 700 vacas de cría de las cuales salen unos 550 animales por año. Los machos se recrían hasta los 350-400 kilos y se venden para que otro los termine, las vacas de descarte se venden con 470-480 kilos y algún grupo de vaquillonas excedentes se preñan con Aberdeen Angus y se venden preñadas.

“Es un sistema productivo basado cien por ciento en campo natural. La carga es de una unidad ganadera por hectárea y la productividad por hectárea es de 130-150 kilos, es bastante estable”, comentó.

Carriquiry es ingeniero agrónomo y además de productor es asesor, investigador y pasó por la función pública. Una de las cuestiones que rescata al hablar del manejo que realiza en su empresa es que su familia está vinculada con esos campos desde hace seis generaciones y que siempre tuvieron “una particular preocupación por la conservación de los recursos naturales”. De hecho, uno de sus hermanos es observador de aves, y a través de él se empezaron a vincular con la Alianza del Pastizal, que reúne a productores con organizaciones conservacionistas tras el objetivo de producir conservando.

“Hemos apostado al pastoreo racional. Ocupaciones cortas, descansos prolongados, dejar remanentes adecuados, darle prioridad a algunas categorías y buscar una producción bastante estable”, dijo.

En el sistema, obviamente el agua también es una preocupación. “Hemos sustituido las aguadas naturales por bebederos… Las aguadas o tajamares, pequeñas represas, están cercadas con alambrados y el agua se distribuye en bebedero aguas abajo de la reserva, apostando a mantener el agua limpia y a mantener la biodiversidad en torno a la aguada”, explicó.

Hace poco, Carriquiry mostró su forma de producir ante la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), buscando aportar matices al debate global sobre el impacto ambiental de la ganadería. Allí contó que, en los últimos años, en su campo plantaron unos 5000-6000 árboles nativos tratando de hacer montes de sombra y abrigo para la hacienda a la vez que se protege la biodiversidad.

Para potenciar el impacto de sus propias prácticas y empoderar a los otros productores, en 2014 Carriquiry fundó junto a otros colegas la Asociación Uruguaya de Ganaderos de Pastizal (AUGAP), que hoy ya tiene más de 150 miembros activos, vinculando la conservación de campos naturales, la producción y la aplicación de técnicas regenerativas.

También participa del protocolo regional Carne de Pastizal. “El 50 por ciento mínimo tiene que ser campo natural y se permite la suplementación estratégica, pero no el confinamiento. Eso nos permitió participar de la exportación de carne de calidad a Europa. Hace tres años, a razón de un container por mes, estamos enviando a Europa carne para food services, restaurantes y hoteles. Van a Holanda y desde ahí se distribuye a toda Europa”, explicó, y agregó: “Pensamos que la demanda de carne que conserva los recursos y la biodiversidad está empezando a tener un lugar en la decisión de la gente”.

Además, mediante un proyecto financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) de bienes públicos regionales, adoptaron una herramienta de medición de un índice de contribución a la conservación de pastizales naturales, elaborado por el reconocido investigador argentino Ernesto Viglizzo. “Creemos que es una herramienta buena que se puede aplicar masivamente”, aseguró.

Luego explica que el índice se llama ICP y además de medir la proporción de campo natural que hay en cada establecimiento, mide el estado de conservación, tomando en cuenta la presencia de especies de valor forrajero, penalizando la presencia de especies exóticas y valorizando la variabilidad y estructura de la vegetación, que está muy vinculada a la biodiversidad. Además repara en las áreas que no son pastizal y les da una valoración diferente según se trate de pasturas permanentes, verdeos, cultivos, forestación, qué tipo de forestación, si hay una rotación agrícola… “Toda esa información da como resultado un índice que va de cero a cien en el que el cero es un establecimiento que no aporta en nada a la conservación y cien es uno que aporta el máximo”, indicó.

De esta manera, con creatividad, información y visión de futuro, la ganadería regional puede adaptarse a las demandas y dejar de ser un problema para ser parte de la solución.

Fuente: Clarín.

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Perspectiva agroclimática trimestral para el arranque de la zafra

El Instituto de Biotecnología Agrícola (INBIO) presentó su informe de perspectiva climática, para ayudar al productor a conocer el posible escenario agrometeorológico que se podría presentar en el inicio de la zafra 2021-2022. Lo más resaltante en el informe es el pronóstico de precipitación mensual, destacándose la disminución de cantidad de lluvia que estaría cayendo, con relación a los parámetros históricos.

Según el informe del INBIO, en septiembre se estima un patrón de distribución de la precipitación con niveles levemente por debajo de la normal, en el centro, sur y este de la Región Oriental del territorio nacional. Los departamentos que mantendrían las condiciones normales son San Pedro, Canindeyú, Concepción Amambay y gran parte de la región Occidental.

En octubre, las predicciones muestran que la distribución de la precipitación seguiría con posibles niveles levemente por debajo de la normal, ya que en este mes debería llover entre 100 a 150 milímetros, sin embargo, el pronóstico señala que no se darán esas condiciones.

En noviembre, se mantendrían las probabilidades de observar déficit en la distribución de la precipitación en gran parte del territorio nacional a excepción del Alto Chaco, donde se observa un núcleo con niveles normales en acumulados.

Los departamentos ubicados en el centro sur el este y el centro norte de la región oriental serían los más afectados en cuanto a la distribución de lluvias.

En cuanto a posibles olas de calor, los resultados muestran registros de posibles eventos en los tres meses, concentrándose marcadamente en zonas de la Región Occidental y en menor cantidad de ocurrencias en el sector sur de la Región Oriental, siendo octubre el mes de mayor incidencia de este fenómeno.

Al realizar una interpretación del escenario agroclimático se puede resumir que en los próximos tres meses nos espera una distribución muy deficitaria de lluvias y con posibles altas temperaturas, que podrían ocasionar mucha evapotranspiración, entonces lo que caiga de lluvia estaría evapotranspirando muy rápido.