El Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa) confirmó el tercer foco de influenza aviar y sacrificó los animales en la ciudad de Filadelfia, departamento de Boquerón, mismo lugar donde se registraron los casos anteriores.
Se sacrificaron 124 aves, en su mayoría gallinas, aunque también hay patos, pavos y guineas
Desde la confirmación del virus en Paraguay, las granjas reforzaron sus sistemas de bioseguridad para mantener el estatus sanitario y los mercados internacionales de la carne aviar.
La producción familiar afectada en Filadelfia tenía 70 aves, entre gallinas, pavos y patos, de las cuales 22 murieron por la enfermedad, 4 animales vivos tenían síntomas y 44 estaban sanos al momento de realizar la verificación, según explicó el director de Epidemiología del servicio veterinario oficial, Carlos Ramírez.
A diferencia de los casos anteriores, la vivienda que cría las aves de autoconsumo se encuentra casi sobre la ruta Transchaco y representa un mayor riesgo de contaminación debido al tránsito de personas y vehículos en la zona.
En el marco del plan de contingencia, el Senacsa sacrificó las 48 aves con síntomas y también las sanas, debido a que el periodo de incubación es de 21 días y el virus aún puede manifestarse en los animales que hasta ahora no presentaron cuadros respiratorios.
Fuente: Última Hora.