Los productores locales se vuelven cada vez más ávidos de las tecnologías y, en la medida en que identifican los beneficios, van adoptando nuevas soluciones. Ante la creciente disponibilidad de tecnologías digitales que dan la posibilidad de transformar la producción, lograr mayor productividad y generar un efecto multiplicador para toda la economía del país, el campo se adapta a las nuevas tendencias que conjugan el trabajo duro con las más modernas soluciones.
La adopción de la amplia variedad de tecnología de aplicación responde a la necesidad y la capacidad de cada productor. Estas tecnologías son muy utilizadas en el sector de fitosanitarios y fertilizantes, donde la tendencia es lograr colocar, cada vez, la cantidad más exacta de los productos en los cultivos, apuntando así a la economía del productor y la sustentabilidad.
En este escenario, la Cámara de Fitosanitarios y Fertilizantes (Cafyf) promueve las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) en el uso y manejo seguro de los defensivos agrícolas, lo que incluye la gestión adecuada de la tecnología de aplicación y demás innovaciones.
Programas como Campo Limpio y CuidAgro permiten un manejo más eficiente y sustentable en los cultivos agrícolas, ofreciendo productos más inocuos y más selectivos al mercado. El sector desarrolla tecnologías acorde a las necesidades que van emergiendo y los desafíos de los mercados, orientado a pequeños, medianos y grandes productores, ya que los desarrollos tecnológicos tienen el objetivo de ser aplicados en cultivos extensivos y de menor escala. Beneficios Esto permite a los productores optimizar sus costos, evitar o reducir pérdidas de productividad en los cultivos y trabajar en armonía con el medioambiente.
Además, está la biotecnología que facilita el trabajo del productor, reduce las aplicaciones en los cultivos beneficiando al ambiente y al consumidor final. Asimismo, la innovación tecnológica logró que la cantidad de ingrediente activo utilizado por un agricultor sea aproximadamente un 95 % más bajo que la tasa utilizada en la década de 1950, según detallaron desde el gremio. La Cafyf sostiene que la capacitación es uno de los factores claves para la transferencia de tecnología.
En ese sentido, trabajan con aliados estratégicos y prepara a los capacitadores, entre ellas las escuelas agrícolas y diversas organizaciones públicas y privadas. Finalmente, consideran que para la fluidez de las innovaciones es importante el respeto, reconocimiento de la propiedad intelectual y mecanismos regulatorios flexibles que faciliten la introducción de las innovaciones tecnológicas, así como las acciones concretas de las instituciones de control para hacer frente al comercio ilegal.
